El muelle de Sainte-Anne-de-Beaupré es un elemento inseparable de los paisajes de la Côte-de-Beaupré desde los primeros días de la colonia. Este embarcadero marítimo fue, desde mediados del siglo XIX, el principal vínculo entre el río San Lorenzo y un santuario dedicado a Santa Ana, el mayor centro de peregrinación en América del Norte. En el contexto del deseo de destacar las vistas al río en la región de la Capital Nacional, se creó la Corporación de Desarrollo del Muelle de Sainte-Anne con el fin de restablecer el acceso fluvial para la comunidad local y los turistas. El proyecto materializa la visión inicial de crear un espacio público multifuncional que cumpla con los objetivos de animación urbana y accesibilidad al río, complementando la oferta recreativa regional. Además de ofrecer un equipamiento público a escala humana que se centra en la experiencia paisajística, la firma visual fue diseñada en torno a la presencia del lugar de peregrinación, siempre perceptible de forma oblicua a medida que se recorre el espacio. Esta angulación fue la base para las líneas de composición en el suelo y la formalización volumétrica del pabellón, otorgándole un dinamismo intrigante. El pabellón de bienvenida es un espacio polivalente y accesible durante todo el año. Se presenta en forma de un gran volumen simple con un techo a dos aguas, cubierto con un revestimiento metálico gris claro y tablones de cedro blanco del este. Paralelo al eje del muelle, sus dos extremos apuntan hacia la basílica e invitan a caminar por el paseo. La forma del pabellón se inspira en los cobertizos para barcos y hace un guiño a las volumetrías simples de los edificios residenciales históricos de la Côte-de-Beaupré. Una estructura de entramado ligero de madera permite revelar, de manera sencilla pero espaciosa, la sala de espera, un vestíbulo de recepción con servicios adyacentes. Tres ventanas en el techo articulan su geometría y magnifican la luz al final del día.