El proyecto se ubica en la ciudad de Loja, en la intersección de las calles Rocafuerte y José Joaquín de Olmedo. El objetivo principal es la creación de un espacio cultural de estancia para la promoción de actividades artísticas y culturales. La propuesta arquitectónica se basa en el uso de una estructura metálica combinada con placas de hormigón, logrando un diseño moderno, resistente y funcional. La elección de la estructura metálica proporciona una flexibilidad significativa en el diseño, permitiendo adaptaciones futuras según las necesidades del espacio. Las placas de hormigón de alta resistencia se emplean tanto en el suelo como en áreas exteriores, asegurando durabilidad, estabilidad y una continuidad estética entre el interior y el exterior. El proyecto cuenta con varios espacios funcionales, incluyendo salas de exposición diseñadas para albergar distintas formas de expresión artística gracias a su versatilidad. Además, se incorporan áreas multifuncionales pensadas para talleres, conferencias, presentaciones en vivo y eventos culturales, brindando un espacio adaptable a diferentes actividades. También se incluyen zonas al aire libre, como patios y terrazas con placas de hormigón, que proporcionan áreas abiertas y flexibles para actividades al aire libre. La accesibilidad es un aspecto fundamental del proyecto, implementándose rampas y elevadores para garantizar la inclusión de personas con movilidad reducida. De esta manera, el diseño promueve no solo la estética y la funcionalidad, sino también la integración y la accesibilidad universal. Este espacio cultural busca ser un punto de encuentro que refleje la diversidad cultural y artística de Loja. La combinación de la estructura metálica con las placas de hormigón y sus diferentes texturas y colores aporta un equilibrio entre modernidad y tradición, integrándose al contexto urbano de manera armónica