IKIGAI
Premio de participación: Premio Medalla de Oro
Categoría de participación: Vivienda Multifamiliar
País de representación: Ecuador
Participantes:
- Arq. Sara María Aguirre Gonzales
Memoria
La búsqueda de nuevos entornos habitables por parte de las familias quiteñas ha generado un crecimiento exponencial de la mancha urbana en Cumbayá y Tumbaco en los últimos diez años. Esto ha dado lugar a urbanizaciones cerradas que, en muchos casos, ignoran su contexto. A partir de esta problemática, se propone un conjunto de vivienda y recreación que responde a diversas formas de habitar en familia y en comunidad. Ikigai es un proyecto ubicado en Tumbaco, frente a la Av. Ruta Viva, que, basado en un análisis detallado de las necesidades sociales, busca no solo garantizar su viabilidad, sino también un estilo de vida que evoque el campo, agregándole todas las comodidades que ofrece la ciudad.
Con tres tipologías de vivienda, la zona residencial proporciona espacios adecuados y accesibles universalmente para que todos los usuarios, incluidos adultos mayores y personas con discapacidad, disfruten plenamente de sus familias, hogares, y de las áreas comunales. Estas áreas se conciben como espacios de encuentro y esparcimiento para toda la comunidad. La urbanización se conecta directamente con el edificio de uso recreativo y de servicio, generando un espacio de intercambio entre residentes y visitantes.
Las áreas comunales se conectan visual y físicamente con los jardines de cada vivienda, promoviendo relaciones entre vecinos, seguridad y dinámicas de vida activas. Un sendero rodeado de vegetación atraviesa los lotes, conectando las zonas colectivas de la urbanización como parques, canchas y dos estanques grandes que recolectan el agua lluvia para uso futuro. Además de esta, el proyecto incorpora otras estrategias ecoeficientes como la generación de energía solar y la conservación del 80% de la vegetación nativa preexistente en el terreno.
La arquitectura armoniza con el paisaje a través de geometrías, materiales y colores que responden al entorno. Plazas peatonales al frente del proyecto suavizan la transición entre la Av. Ruta Viva y el edificio recreativo, creando una atmósfera segura para el peatón. La fachada del edificio recreativo, con listones horizontales, simboliza el movimiento de la vía. Las viviendas, con fachadas de madera y hormigón, evocan casas campestres en la naturaleza, creando cohesión con el entorno. El proyecto busca ser un referente estético para futuras urbanizaciones, promoviendo la armonía entre lo construido y lo natural, y creando un paisaje donde ambos elementos se complementen.