Hoyo 19
Premio de participación: Premio Nacional
Categoría de participación: Equipamiento
País de representación: Ecuador
Participantes:
- Arq. Felipe Palacios
- Arq. Johann Moeller
- Arq. Sebastián Luzuriaga
Memoria
Un golfista se ve inmerso en una relación particular con el entorno natural. Movimiento, desplazamiento y recorrido a través de escenarios contenidos por la naturaleza, pero no delimitados por un ritmo o tiempo específico. Un campo de golf, más allá de ser una oportunidad de desarrollo deportivo, es un punto de encuentro al que se acude buscando dispersión, recreación, interacción, desarrollo cultural y social. Es un lugar para la competencia y para fortalecer relaciones interpersonales.
Hoyo 19 es una extensión del campo de golf, su significado y carácter. Es un refugio para golfistas que buscan un espacio de encuentro y comunidad previo/posterior al juego en el Arrayanes Country Club. Su ubicación es única, al borde del fairway. El proyecto busca aprovechar las mejores cualidades del lugar: propone un marco espacial que mantiene conexión constante con el campo de golf y la naturaleza, e interpreta el estilo arquitectónico del Club de forma contemporánea y transparente.
La plazoleta de ingreso se conforma como un foyer externo que articula el diálogo con los elementos del entorno y conjuga flujos y necesidades: el dinamismo deportivo del green del hoyo 18, la actividad comunal de la Plaza de las Banderas y los accesos.
La arquitectura del Hoyo 19 se materializa como una prolongación del paisaje, a través de planos alargados y líneas horizontales que acentúan el sitio. Desde la tierra y hacia los extremos, se erigen dos muros de piedra que enmarcan el edificio. La composición de planos y volúmenes propone una integración armoniosa con el campo que invita al usuario a descubrir el espacio de manera orgánica y multidireccional. Recorrer el proyecto es experimentar el movimiento a través de una secuencia espacial continua.
El proyecto está estructurado por tres espacios principales caracterizados según uso y ubicación: el sports-bar, el restaurante y el lounge. El interior se desenvuelve en torno al bar, funciona como un corazón activo que articula experiencias y flujos. El restaurante actúa como una extensión del carácter social del campo de golf; crece en altura y direcciona las vistas al exterior, acogiendo cualquier tipo de evento. En contraste, el lounge presenta un espacio de mayor privacidad, calma e intimidad, abrazado por el bosque. Ambos espacios destacan por su transparencia y se extienden al paisaje por medio de terrazas que difuminan los límites con el campo.
Desde cualquier rincón, es posible observar y sentir la emoción de cada hoyo. Habitar el Hoyo 19 es experimentar el golf en cada detalle: el interior delinea la calidez de un espacio que evoca la estética clásica asociada al deporte. Las tonalidades de la madera y el cuero se combinan con verde oscuro, respondiendo a la iconografía histórica del golf y dotando al espacio de identidad visual y tradición. Las texturas y patrones emblemáticos del vestuario golfístico aparecen en detalles como el tartán y la memorabilia. Llegada la noche, el edificio se enciende con detalles de iluminación que enfatizan el espacio, los gestos arquitectónicos y los eventos que se llevan a cabo, resaltando a quienes lo habitan.