Casa de las Estrellas, Escuela Waldorf
Premio de participación: Premio Panamericano
Categoría de participación: Equipamiento
País de representación: Costa Rica
Participantes:
- Arq. Evangelina Quesada
- Arq. Lucca Spendlingwimmer
Memoria
Escuela Waldorf, Casa de las Estrellas
El principal desafío fue plasmar a través de la arquitectura el concepto de educación Waldorf de manera tangible, teniendo en cuenta los lineamientos de sus fundadores. Esto se traduce en espacios estimulantes, fluidos, abiertos, con superficies texturizadas y materiales naturales.
Como punto de partida quisimos adaptar la arquitectura al sitio, con el objetivo de reducir el impacto de la construcción en el entorno y mantener así, la armonía en el lugar.
La distribución de módulos separados que se alargan sobre el sitio permite enfocar el proyecto hacia el mar; repitiendo esta sensación de fluidez. Y, a su vez, permitiendo diferenciar los espacios académicos según las necesidades de los distintos ciclos educativos.
El edificio principal concentra las aulas de primaria, la administración, los baños, la cocina y el comedor. A un lado está el estacionamiento, la entrada principal y la sala de artes escénicas. Al otro lado, están las aulas de preescolar.
En preescolar, según los principios Waldorf en cuanto a la actividad y las sensaciones, proponemos aulas más orgánicas con materiales naturales que inspirarán a los niños. La planta arquitectónica consiste entonces, en una espiral de caracol que se abre en su entrada y se cierra poco a poco en su sinuoso recorrido hasta formar la sala central.
El techo es una estructura autoportante de piezas de madera que se entrelazan siguiendo la forma de la espiral, formando una abertura circular que permite el ingreso de luz natural. Esto permite organizar las actividades curriculares en función del sol y su recorrido. La cubierta está minuciosamente confeccionada con tejido de zacate navajuela según la tradición indígena del sur de Costa Rica.
La configuración de las aulas de primaria se hizo más simétrica, representando una etapa más madura del niño. El diseño modular permite distribuir los espacios y a su vez mantener un orden estructural, lo que agilizó el proceso de construcción y significó una reducción en el desperdicio de materiales.
La estructura principal está construida sobre pilotes y los módulos están separados entre sí por patios, para mayor privacidad. El techo está separado del cielo, a modo de techo flotante, permitiéndole al aire pasar a través de los espacios y mantener más fresco el espacio interior.
Casa de las Estrellas es un hogar en el bosque donde se respira una suave brisa marina, y donde los niños aprenden, corren y juegan entre los laberintos que forman los árboles y los espacios construidos.