Academia Atlas, el nuevo hogar para uno de los equipos de fútbol más longevos de México, Atlas FC de Guadalajara, transforma siete hectáreas de terreno en un campus tipo universitario con seis campos de fútbol profesional, casas club, instalaciones de ciencias aplicadas al deporte y oficinas administrativas. Su enfoque principal es brindar alojamiento y recursos a jóvenes jugadores de entornos desfavorecidos. Utilizando materiales de origen local y adoptando técnicas de construcción tradicionales, el complejo principal fue diseñado en torno a un sistema modular consistente, que permite la flexibilidad necesaria para transformar o ampliar los espacios interiores en función de las futuras necesidades del club. Vacíos al aire libre se encuentran con estructuras básicas de columnas y vigas que enmarcan el edificio, estableciendo un efecto de cuadrícula. La cubierta reticulada actúa como brise-soleil en las zonas más densamente construidas del edificio. Dentro del definido volumen rectangular de 8,300 metros cuadrados, el edificio incorpora espacios exteriores que proporcionan recorridos suavemente sombreados a través del conjunto arquitectónico. Estos se leen como pasajes urbanos, patios privados y pequeñas plazas ajardinadas. Las escaleras exteriores que se insertan en estos espacios crean una fuerte relación y fomentan la sensación de fluidez entre el interior y el exterior. La zona de asientos de los espectadores también favorece esta conexión interior-exterior a lo largo de la fachada oeste. Resultó ser un espacio muy flexible que, cuando está vacío, sirve como un área contemplativa o un lugar para relajarse. Si hay algún partido, familiares, amigos y público en general pueden acudir a apoyar a sus jugadores favoritos, transformándose en un lugar muy dinámico. Durante los entrenamientos, los atletas utilizan estos volúmenes escalonados para calentar. El color rojo monocromático utilizado en todo el proyecto está relacionado con la identidad del equipo de fútbol y con el empleo del ladrillo tradicional mexicano. La estructura de concreto pigmentado se coló in situ, mientras que las losas de concreto del piso se prefabricaron para un rápido montaje en obra. Los ladrillos rojos se diseñaron especialmente para el edificio en cuanto a proporción, medidas, color y funciones estructurales. Como resultado, el contratista consiguió una importante reducción de residuos durante el proceso de construcción. El diseño de paisaje se concibió para incorporar únicamente especies endémicas, con el fin de que se adaptaran al entorno durante las distintas estaciones del año. Se propone que algunas plantas trepen por la estructura, introduciendo una deliberada cualidad atemporal que ayuda a crear una sólida percepción del lugar en un sitio que no ofrece puntos de referencia inmediatos en términos de escala o precedentes culturales. Academia Atlas es un interesante caso de estudio sobre cómo puede aplicar un sistema modular rígido de 8.4mx8.4m para crear un edificio flexible, dinámico y atractivo gracias a la riqueza de sus cualidades espaciales. También es un ejemplo de cómo redefinir las tipologías convencionales de edificios de arquitectura deportiva.